La vez pasa dejamos inconclusa la entrevista a Héctor una estatua humana de la delegación Cuauhtémoc y entonces aquí les dejo la parte final de esta entrevista.
E.- ¿Cuántos personajes tienes?
H.- Tengo cinco vestuarios pero de esos cinco solo suelo usar tres por que dos son de mujer y raras veces me ves vestido de mujer.
Mira con algunos personajes tengo desventajas, si lo quieres ver así, por que hay personajes que los uso y no hago en si lo que es la estatua, a unos les aporto mas mímica, otros hablan más con la gente, por ejemplo este personaje dice poesía y está basado en el poema “Los amorosos” de Jaime Sabines, yo considero a este personaje el amoroso de el poema y en cierto modo lo que hace es cortejar a las mujeres para que vean que el romanticismo no se ha perdido, por que las generaciones que vienen piensan que es “me lates” y ya se les olvida todo lo de mas y pues en cierto modo este personaje trata de rescatar el romanticismo y tengo otro personaje que expresa, por ejemplo, una crítica a lo que es mi carrera, ya que como abogado te das cuenta que hay todo un mundo de corrupción y este personaje es “la justicia” y lo que dice es que está harta de las instituciones y su corrupción y por eso se salió a las calles.
E.- ¿Hay alguna anécdota que nunca olvidaras?
H.- Bueno he de decirte que aquí vives de todo, desde las personas que piensan que por que estas aquí trabajando en la calle eres un vago alguien sin educación y te insultan, policías que te tratan como si fueras de lo peor, bueno no digo que todos hay algunos que no, pero si hay un momento que si me movió y fue hace como tres años, yo tenía un personaje de la muerte y lo precisamente lo deje de sacar, porque mucha gente me lo plagio, pero bueno, estaba basado en un libro de Carlos Castaneda que se llama “Viaje a Ixtlán”, habla de la muerte como eterna compañera y el autor dice que la muerte siempre está a tu izquierda en busca de un momento oportuno para llevarte y entonces pensé ¿Por qué la muerte no nos da una oportunidad, un aviso, algo? Entonces cree mi personaje, que lo que hacia era ofrecer una frase, igual esta frase te llega y te cambia la vida en ese momento, entonces resulta que viene una señora, me da dinero, le doy una frase, se va, como a los cinco minutos regresa y me dice “tenias razón”, pero yo con ese personaje no hablaba, me vuelve a decir “tenias razón” y ¡pum! se le llenan los ojos de lagrimas y con un nudo en la garganta me dice “mi esposo murió la semana pasada”, la verdad no se qué frase le toco pero nunca olvidare eso.
Siempre he pensado que con que cambies a una persona todo esto ya valió la pena, porque esa persona puede ser una cadenita que ayude a otro y así consecutivamente.
Otra experiencia que me marcó, aunque esta es mas de compañerismo entre los que trabajamos aquí, bueno sucede que un tiempo trabaje con una chica, compartía mi permiso con ella y pues terminamos mal, entonces a los pocos días que le dije que ya no quería trabajar con ella, viene con unos guarros me empieza a reclamar, uno de los tipos me suelta un puñetazo y yo pensé “ya me cargo la tostada”, cuando llegan las demás estatuas, los de los locales de aquí cerca, el de los periódicos, los polis y que me los quitan de encima, es día me di cuenta que mas que compañerismo con el tiempo entre nosotros se genero una hermandad entre todos los que trabajamos aquí.
E.- Y ya para terminar regálanos unas palabras, un mensaje, lo que quieras decir para todos los chavos.
H.- Bueno pues más que nada que no quieran comerse al mundo de una sola mordida, disfruten su juventud con responsabilidad y traten de pensar mas las cosas que hacen, eso es todo.
E.- Muchas gracias Héctor, fue todo un placer platicar contigo.
Y aquí termina la entrevista a Héctor una estatua humana de la delegación Cuauhtémoc, nos leemos en nuestra siguiente y última entrevista.
